Ganas de pateo y conectar con la naturaleza…así es que comienzo el año con una ruta en el Parque Rural de Anaga, desde el precioso pueblo de Taganana, con playas vírgenes y macizos que afloran del mar. Taganana es la localidad mas del importante y antigua del macizo de Anaga. En el siglo XVI sus tierras se dedicaron al cultivo de la caña de azúcar, de aquí la construcción del Camino de Las Vueltas, vía mas importante de comunicación del macizo de Anaga desde donde se trasladaba la producción a Santa Cruz y La Laguna.

Pues vamos a patear…12 Km de camino, llegando a una altitud máxima de 932 m y en un 6 horas de tiempo. Antes de comenzar una mirada a la montaña y comenzamos. Todo un espectáculo ver desde la montaña los macizos. La vegetación está en su punto, la humedad capturada y transportada por los vientos alisios hacen que la flora canaria siempre esté en su punto, la Laurisilva transforma el camino en un bosque mágico, los Helechos, como si de un manto se tratara, cubrían junto a matorrales y musgo las laderas de esta parte de este Gran Macizo de Anaga. Durante el recorrido admirada por la belleza del lugar, me inquieta grandemente, la sequedad y aridez de parte del camino. Llevo ya años viendo el monte muy muy seco, y como siempre digo «mamá tierra está sufriendo».

Os dejo algunas fotos de esta maravillosa ruta, donde los sentidos y el encuentro de amantes de la naturaleza han hecho aún mas enriquecedor la ruta.