…tiempo con mi peludo…
Pasar una mañana con él, sin prisas….darle tiempo…llevarlo donde más le gusta…esconderme y que me busque…peinarlo…sentarnos en el césped y mirarnos…como le gusta!, es de esos perritos pequeños, listos y muy dependientes, me tiene frita, va para ocho años y se llama Toy.
Llegó a casa una noche de reyes magos, muestro anterior perro, un scottish terrier, Terry, listo y muy independiente…hasta la televisión la veía, fue todo un personaje en los primeros años de mi hija, años después vino Toy, un compañero de juegos, todo un cómplice y confidente…muchas conversas les he llegado a escuchar…
Dedicarle tiempo, es un reporte de comprensión y agradecimiento por su chispa y compañía, por estar sin llamarlo, por entender sin preguntarle y por estar pendiente siempre de nosotras…Mirarnos a los ojos es algo sublime…te transmite agradecimiento por tenernos y nosotras por tenerlo.
Gracias por tanto peludito